Toño Malpica
"Todos tenemos algo que contar; me autodefino como un contador de historias"

Por Virginia Krasniansky

En Club de Lectores trabajamos con el interés de fomentar la lectura, ser facilitadores de libros, acercar autores a los lectores e impulsar la propuesta de literatura infantil y juvenil. Hoy entrevistamos al escritor Antonio Malpica, que pre_ ere llamarse Toño Malpica y así se presenta: Antes de comenzar, deseo agradecer a Club de Lectores por considerarme y así permitirme estar presente junto a una pléyade de autores muy reconocidos. Escribo novelas y cuentos especialmente para niños y jóvenes, y creo que los maestros me reconocerán porque, afortunadamente, mis libros han llegado a las escuelas.

¿Cómo llegaste a ser escritor?

Llegué a las letras casi por accidente. Soy ingeniero en computación, pero en un momento de mi vida me di cuenta de que me hacía más feliz contar historias. Comencé en el teatro, luego tuve presencia en el mundo musical y, finalmente, es en el camino de las letras para niños y jóvenes en donde me siento más a gusto.

¿Estas actividades diferentes, vinculadas a la realidad y también a la fantasía, han sido inspiradoras para tus escritos?

Cuando escribes, te nutres de todo lo que te conforma. Echas mano de tus recuerdos, de lo que has leído, de lo que has escuchado y de lo que has vivido. El camino que seguí me puso en manos de las letras, aunque la ingeniería me ha ayudado dándome ciertas herramientas para escribir de una manera propia.

Por lo que me dices, en el trabajo creativo hay algunas características innatas y otras aprendidas. ¿Qué le dirías a los maestros, alumnos y, en general, a nuestros lectores que desean poner en práctica una actividad diferente y realizar el sueño de escribir?

Que todos tenemos algo que contar. Yo me autodefino como contador de historias y también me gusta decir que soy promotor de la escritura. En algún momento de nuestras vidas, debemos darnos el permiso de decir eso que tenemos guardado y procurar que salga de la mejor manera. Así comencé, sin ningún tipo de preparación en términos literarios, por la pura necesidad de contar cosas usando la inventiva, entregándome de cuerpo entero a la ficción. Yo tuve una infancia muy feliz. Fui un niño muy imaginativo, jugué mucho; mis padres me dieron muchas libertades y quizás esa sea la razón por la que escribo para niños y jóvenes.

Supongo que al ser escritor con una gran experiencia, relatas y puedes nombrar los sentimientos, y esa es quizás una forma de compartir con tus lectores en tus libros. ¿Qué nos puedes decir al respecto?

Ahora es más fácil expresar públicamente lo que sentimos o pensamos, pues existen el Facebook o el Twitter; por ejemplo, aquellos que son contemplativos en esas redes sociales, a veces se animan a contar una historia o escribir una experiencia de vida y eso es un gran punto de partida. Lo que se cuenta o expresa puede afectar a otros, y en eso finalmente los escritores, los actores de teatro o los seguidores de redes sociales tienen una corresponsabilidad que engrandece la comunicación.

Los maestros en las escuelas realizan la promoción de la lectura y también existen las ferias de libros; por cierto, tú eres el embajador de la Feria del libro Infantil y Juvenil (FILIJ) 2019. Me gustaría preguntarte ¿cómo inciden e interactúan entre sí el libro impreso en papel y los soportes electrónicos?

Hay que encontrar una relación armoniosa entre los diferentes soportes de lectura, que sean formas paralelas. No hay demérito en la lectura en medios electrónicos ni en libros tradicionales de papel. Te emocionas y disfrutas igual. Para las personas de edad avanzada, leer en soportes electrónicos favorece, porque se puede aumentar el tamaño de la letra. Para los jóvenes, leer en los libros tradicionales de papel se pondera, porque se necesita tener presencia. No imagino una feria de libros que no tenga ejemplares en papel.

En su mayoría, tus lectores son jóvenes o primeros lectores, ¿cómo recibes los comentarios sobre tus libros?

Como mencioné, yo soy contador de historias. El público infantil es muy noble y sincero, además de afectuoso. No me preocupa definir ni calificar el contenido de un libro mío; no sé si escribo novela negra o novela rosa, lo que me importa es poner un poco de mi parte para que ésta sea una mejor humanidad y dejar semillas de letras en los lectores.

En estos tiempos, hay una gran insistencia en la promoción de la lectura, ¿cuáles son tus proyectos como embajador de FILIJ?

Ser embajador de la literatura infantil y juvenil en FILIJ es un título honorario que nos permite realizar muchas tareas para apoyar las políticas públicas del gobierno federal y de los gobiernos de los estados de la república. Estamos trabajando, y con la experiencia de muchos años de escritor, quiero apostar por nuevas propuestas para beneficio de los lectores y de la literatura. Yo creo que el libro electrónico favorece mucho la promoción de la lectura, pues facilita la distribución, ya que casi todos tienen hoy un teléfono móvil en el cual pueden leer los libros que gusten.

¿Qué mensaje te gustaría dar a nuestros lectores?

Me gustaría dar un mensaje de gratitud. La mayoría de los autores mexicanos estamos cerca de los niños gracias a los maestros y a las nuevas tecnologías. El círculo se cierra en nuestro encuentro con los lectores por el dialogo que se genera. Es por esto que felicito el trabajo que realizan en Club de Lectores, porque nos acerca con los lectores.